
El motivo para que alguien decida estar totalmente solo durante semanas es sin duda algún tipo de depresión interna que ha ocurrido gracias a una decepción o también debido a una falla en el sistema cognitivo diario. Esta separación de la sociedad hace que se empiece a pensar en las personas y de algún modo meditar el porque del exilio y el alejamiento de las mismas.
Normalmente la respuesta más simple es desilusión. La desilusión en una persona acarrea separarse de esta, pero la repetitiva desilusión con cada individuo que se conoce hace que solo se logre alejarse de la especie e intentar pensar en ella para volver a lograr empatía y confiar en la misma. Las personas son cada vez mas extrañas, nadie sabe lo que quiere y nadie es capaz de hacernos entender como llegar a lograr lo que anhelamos. El que quiere entender que lo aprenda solo, el que quiere crecer que luche con el tiempo. El universo es tan vasto que lograr conocer a cada persona que nos da una mirada gratificante o nos interesa sin motivo alguno es casi utópico, es por eso que necesitamos un tipo de filtro para conocer gente y otro más complejo para permitir que esa gente se quede en nuestras vidas. Lograrlo no es fácil, se necesita paciencia para conocerlas y alguna teoría simpática que nos logre servir como tamiz hacia la infinidad de personas que son capaces de volverse nuestras amigas y confidentes.
Este filtro radica en creer siempre en que las personas estarían más cerca gracias a una promesa, la ilusión de cumplirla como un dogma de fe es lo que suele brindar esperanza hacia el futuro. Ahora gracias a eso solo disfruto de los momentos, del ya o el ahora, no pienso mas en el futuro, el tiempo como lo conocía dejo de existir, solo aparece cuando decido aburrirme o frustrarme. La esperanza, que solía ser la jefa de todas mis sensaciones, se vuelve difusa quitándole por cada promesa incumplida un millón de latidos a mi quebrado corazón. La ilusión de creer que aun existen personas que pueden y deben lograr empatía con uno mismo hace que las ganas de seguir confiando crezcan a través del tiempo, pero las caídas enseñan y vuelve un mundo de sueños e ilimitado, en un mundo de temor y realidad donde el futuro esta enredado con el pasado cuando jamás debería de ocurrir, por eso es que aun podemos decidir en la vida y por lo mismo es que esta hecha de instantes para emprender a cada segundo un nuevo camino de soledad o compañía si es que una promesa se llega a cumplir o no.
Es necesario reconocer la importancia de una promesa y el vinculo de esta con la esperanza, la confianza en el que promete, el deseo que esta se cumpla y el creer que las personas no juegan con nosotros sino que aún son capaces de tener palabra y demostrarnos cuán importantes somos para haberse comprometido de ese modo.
Normalmente la respuesta más simple es desilusión. La desilusión en una persona acarrea separarse de esta, pero la repetitiva desilusión con cada individuo que se conoce hace que solo se logre alejarse de la especie e intentar pensar en ella para volver a lograr empatía y confiar en la misma. Las personas son cada vez mas extrañas, nadie sabe lo que quiere y nadie es capaz de hacernos entender como llegar a lograr lo que anhelamos. El que quiere entender que lo aprenda solo, el que quiere crecer que luche con el tiempo. El universo es tan vasto que lograr conocer a cada persona que nos da una mirada gratificante o nos interesa sin motivo alguno es casi utópico, es por eso que necesitamos un tipo de filtro para conocer gente y otro más complejo para permitir que esa gente se quede en nuestras vidas. Lograrlo no es fácil, se necesita paciencia para conocerlas y alguna teoría simpática que nos logre servir como tamiz hacia la infinidad de personas que son capaces de volverse nuestras amigas y confidentes.
Este filtro radica en creer siempre en que las personas estarían más cerca gracias a una promesa, la ilusión de cumplirla como un dogma de fe es lo que suele brindar esperanza hacia el futuro. Ahora gracias a eso solo disfruto de los momentos, del ya o el ahora, no pienso mas en el futuro, el tiempo como lo conocía dejo de existir, solo aparece cuando decido aburrirme o frustrarme. La esperanza, que solía ser la jefa de todas mis sensaciones, se vuelve difusa quitándole por cada promesa incumplida un millón de latidos a mi quebrado corazón. La ilusión de creer que aun existen personas que pueden y deben lograr empatía con uno mismo hace que las ganas de seguir confiando crezcan a través del tiempo, pero las caídas enseñan y vuelve un mundo de sueños e ilimitado, en un mundo de temor y realidad donde el futuro esta enredado con el pasado cuando jamás debería de ocurrir, por eso es que aun podemos decidir en la vida y por lo mismo es que esta hecha de instantes para emprender a cada segundo un nuevo camino de soledad o compañía si es que una promesa se llega a cumplir o no.
Es necesario reconocer la importancia de una promesa y el vinculo de esta con la esperanza, la confianza en el que promete, el deseo que esta se cumpla y el creer que las personas no juegan con nosotros sino que aún son capaces de tener palabra y demostrarnos cuán importantes somos para haberse comprometido de ese modo.
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