El mismo sueño me empujo a despertarme, en el veía miles de salidas sin poder evaluar ninguna, tan solo estaba en él, luchando por no atosigarme de tanta información recibida.
El empujón que me hizo abrir los ojos fue el sonido de un switch en mi conciencia, un pequeño clic que me hizo entender que la vida no es cosa de interpretar cada segundo que el reloj cambia de velocidad cuando esta en nuestra contra, sino resucitar esos segundos que están por morir para alargarlos sin necesidad de un instrumento que cuente el tiempo como este.
Ese sonido interno me trajo la calma apenas abrí los ojos y disfruté de la tranquilidad perfecta recostado en una pequeña litera, durante mucho pensé que aquel estado llegaría cuando estuviese despierto mirando algún ocaso o cuando mi concentración llegara al silencio total pero en este caso por primera vez aquel switch que apareció en un sueño que debería de haber olvidado, aún se encuentra inmerso en mi para decidir cuando moverlo para lograr nuevamente esa tranquilidad que por tanto he buscado.
El empujón que me hizo abrir los ojos fue el sonido de un switch en mi conciencia, un pequeño clic que me hizo entender que la vida no es cosa de interpretar cada segundo que el reloj cambia de velocidad cuando esta en nuestra contra, sino resucitar esos segundos que están por morir para alargarlos sin necesidad de un instrumento que cuente el tiempo como este.
Ese sonido interno me trajo la calma apenas abrí los ojos y disfruté de la tranquilidad perfecta recostado en una pequeña litera, durante mucho pensé que aquel estado llegaría cuando estuviese despierto mirando algún ocaso o cuando mi concentración llegara al silencio total pero en este caso por primera vez aquel switch que apareció en un sueño que debería de haber olvidado, aún se encuentra inmerso en mi para decidir cuando moverlo para lograr nuevamente esa tranquilidad que por tanto he buscado.
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